lunes, 26 de agosto de 2019

Personalidad Adictiva


“Del latín addictĭo, la adicción es el hábito que domina la voluntad de una persona. Se trata de la dependencia a una sustancia, una actividad o una relación. Las adicciones controlan los pensamientos y los comportamientos de las personas, que sólo desean conseguir o realizar la cosa deseada. Para satisfacer este deseo, los adictos pueden cometer ilícitos, distanciarse de sus seres queridos y poner en riesgo su propia integridad, ya que pierden noción de la realidad. Existen diversos síntomas que vienen a dejar patente que una persona en cuestión está bajo los influjos de una adicción. En concreto, entre los más significativos se encuentran los siguientes:
•        Pérdida del interés en aficiones o actividades que antes eran muy importantes.
•        Cambios en el peso.
•        Alteraciones bruscas en el estado de ánimo.
•        Irritabilidad.
•        Ira y nerviosismo del adicto cuando alguien le plantea que lo es.
•        Debilidad y dificultad para conciliar el sueño.
•        Cuadros de ansiedad, estrés o depresión.”


Hablar de una adicción es hablar de una enfermedad crónica que se irá desarrollando gradualmente, ya que el paciente hace ajustes en su vida para continuar funcionando a pesar de su enfermedad, es decir, compensan y se adaptan de tal forma que pueden ocultar su adicción por un largo tiempo, hasta que su calidad de vida y su salud se ven notoriamente comprometidos y deteriorados.

Es muy común pensar que una adicción se relaciona solamente con ciertas sustancias como drogas, alcohol o nicotina, pero la gama es tan amplia como el abanico de intereses que tiene el ser humano, así tenemos adicción al juego de azar, redes sociales o a otras personas por ejemplo.

Laham, M. (s/f) nos explica que “El rasgo principal de la conducta adictiva es su capacidad para generar en la persona adicta la sensación de bienestar y gratificación inmediata. En este sentido, simulan aliviar el malestar psicológico que puede producir el estrés, la angustia, la ansiedad y otras emociones negativas, transformándose en un estilo negativo de afrontamiento de dichas emociones.”
En estas personas existe una negación a tomar conciencia de las consecuencias que el hábito que los controla acarrea para su salud o calidad de vida, ya que la pérdida de control caracterizada por episodios convulsivos u obsesivos. Este comportamiento va de menor a mayor paulatinamente.

Existen factores biológicos, familiares (genéticos y culturales), de personalidad y socio-culturales que llevan a la adicción
Debido a que existen adictos con diversos tipos de personalidad y que existen  factores de personalidad que juegan un rol en el desarrollo de la adicción. No se ha desarrollado un perfil concluyente que nos indique si una persona tiene o no personalidad adictiva, sin embargo, se han detectado ciertas circunstancias similares como:
-       Tendencia a aislarse socialmente básicamente por tener pobres habilidades sociales. El objeto de su adicción funciona como un sustituto y compensación.
-       Pobre habilidad en el manejo del estrés y las emociones negativas con falsos estilos de afrontamiento que sostienen en la adicción.
-       Dificultades para expresar los sentimientos.
-       Escasa tolerancia a la frustración.
-       Dificultad de planear y de mantener metas a largo plazo, muchas veces presencia de proyectos utópicos.
-       Suelen ser impulsivas en la resolución de problemas.
-       Extremismo, oscilan entre lo blanco y lo negro sin matices.
-       Tienen comportamientos compulsivos.
-       Cuando deben dejar una adicción suelen sustituirla por otra.

Estos factores coinciden con los criterios del DSM IV, que a pesar de que se tratan de un trastorno de dependencia a otra persona, también son un tipo de adicción:
F60.7 Trastorno de la personalidad por dependencia (301.6) [Criterios CIE-10]
Una necesidad general y excesiva de que se ocupen de uno, que ocasiona un comportamiento de sumisión y adhesión y temores de separación, que empieza al inicio de la edad adulta y se da en varios contextos, como lo indican cinco (o más) de los siguientes ítems:
1. tiene dificultades para tomar las decisiones cotidianas si no cuenta con un excesivo aconsejamiento y reafirmación por parte de los demás.
2. necesidad de que otros asuman la responsabilidad en las principales parcelas de su vida.
3. tiene dificultades para expresar el desacuerdo con los demás debido al temor a la pérdida de apoyo o aprobación. Nota: No se incluyen los temores o la retribución realistas.
4. tiene dificultades para iniciar proyectos o para hacer las cosas a su manera (debido a la falta de confianza en su propio juicio o en sus capacidades más que a una falta de motivación o de energía).
5. va demasiado lejos llevado por su deseo de lograr protección y apoyo de los demás, hasta el punto de presentarse voluntario para realizar tareas desagradables.
6. se siente incómodo o desamparado cuando está solo debido a sus temores exagerados a ser incapaz de cuidar de sí mismo.
7. cuando termina una relación importante, busca urgentemente otra relación que le proporcione el cuidado y el apoyo que necesita.
8. está preocupado de forma no realista por el miedo a que le abandonen y tenga que cuidar de sí mismo.
Por otro lado, en otro tipo de adicciones: “se ha podido observar que entre las personas que abusan de tóxicos se aprecia más frecuentemente una alta tasa de prevalencia de distintos trastornos de personalidad (Seivewright & Daly, 1997; Skodol, OIdham & Gallaher, 1999). De esta manera los trastornos de la personalidad cobran un lugar preferente en la psicología clínica debido a su alta incidencia en la población, unas veces en su apariencia sintomática diferenciada, otras en cambio de forma comórbida con otros trastornos (Millon & Everly, 1994).” Herrero, J. (2004).
En un estudio realizado a 79 usuarios de drogas, de edad comprendida entre 18-65 años y diagnosticados de abuso o dependencia de drogas según criterios DSM IV, con la intención de identificar los trastornos de personalidad que pudiesen influir en su conducta, Salazar-Fraile, J., Ripoll-Alandes, C., & Bobes, J. (2010), encontraron que “Respecto a los trastornos de personalidad, los pacientes caracterizados por la impulsividad/inestabilidad y la pasividad-resentimiento presentan mayor riesgo de recaída durante el tratamiento. Respecto a los rasgos de personalidad, la sensibilidad excesiva a la humillación supone un factor de riesgo de recaída mientras que el orgullo y la confianza en sí mismo supone un factor de protección.” Las variables predictivas estudiadas se caracterizan por una diversidad elevada comprendiendo las sociodemográficas, familiares, legales, comorbilidad con otras patologías así como caracterización del consumo, de la adicción o de la abstinencia. Entre las variables clínicas destacan las referidas a rasgos de personalidad y los trastornos de personalidad, especialmente el grupo B del Eje II de la DSM-IV (límite, antisocial, narcisista e histriónico).
Criterios diagnósticos generales para un Trastorno de la personalidad DSM-IV
A. Un patrón permanente de experiencia interna y de comportamiento que se aparta acusadamente de las expectativas de la cultura del sujeto. Este patrón se manifiesta en dos (o más) de las áreas siguientes:
1. cognición (p. ej., formas de percibir e interpretarse a uno mismo, a los demás y a los acontecimientos)
2. afectividad (p. ej., la gama, intensidad, labilidad y adecuación de la respuesta emocional)
3. actividad interpersonal
4. control de los impulsos
B. Este patrón persistente es inflexible y se extiende a una amplia gama de situaciones personales y sociales.
C. Este patrón persistente provoca malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo.
D. El patrón es estable y de larga duración, y su inicio se remonta al menos a la adolescencia o al principio de la edad adulta.
E. El patrón persistente no es atribuible a una manifestación o a una consecuencia de otro trastorno mental.
F. El patrón persistente no es debido a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p. ej., una droga, un medicamento) ni a una enfermedad médica (p. ej., traumatismo craneal).
Los mismos autores mencionando a Millon y Davis 1996, y refieren que estos trastornos de personalidad se caracterizan por una percepción distorsionada de sí mismo así como la prevalencia de un patrón no adaptativo de relaciones interpersonales y de control de impulsos. Estos trastornos comparten un patrón disfuncional de relaciones interpersonales y una tendencia a la percepción sobredimensionada, subdimensionada o inestable de sí mismo
En otro estudio realizado por Herrero, J. (2004). a 1094 toxicómanos, se encontró que a mayor duración del episodio toxicómano se espera un patrón psicopatológico mucho más pronunciado. Los resultados arrojaron la existencia de una relación significativa entre ambos aspectos. Esta condición genera una vulnerabilidad psíquica que no sólo predispone al individuo a desarrollar un trastorno del Eje I, sino que complica también el curso del trastorno cuando éste existe (Millon et al., 1999). Así, tratar el trastorno del Eje I sin tratar el trastorno de la personalidad, o Eje II, es lo mismo que neutralizar los síntomas sin tratar la enfermedad. Es importante adecuar la intervención psicológica a los distintos trastornos que presentan estos individuos, y que son muy variados. Como consecuencia, en este caso será mucho más operativo definir la personalidad adictiva como un resultado de la alteración de la personalidad causada por un proceso de adicción.

Conclusiones:
Retomando a Laham, M. (s/f): “El rasgo principal de la conducta adictiva es su capacidad para generar en la persona adicta la sensación de bienestar y gratificación inmediata. En este sentido, simulan aliviar el malestar psicológico que puede producir el estrés, la angustia, la ansiedad y otras emociones negativas, transformándose en un estilo negativo de afrontamiento de dichas emociones.”
Concluyo con la idea de que una personalidad adictiva tiene no sólo un factor determinante, es un conjunto de situaciones y alteraciones los que empujan a una persona a una compulsión maladaptativa, primordialmente una falsa imagen de sí mismo como el narcisista, el histriónico o el límite, que se caracterizan por tener una propiosepción distorsionada, lo mismo que su autoestima.
Aprendí que todos tenemos adicciones y que no necesariamente se deben notar a simple vista porque tendemos a modificar nuestros hábitos en torno a ellas, que existe una graduación y que a menor escala, los trastornos aumentan y las condiciones de vida disminuyen exponencialmente y el control sobre si mismo y el mal hábito se pierde del mismo modo.
Cuando se detecta una adicción, se debe mirar que Trastorno clínico (Eje I) manifiesta la conducta del paciente para tratarlo desde ahí, de lo contrario solo sería una modificación temporal y el riesgo de una recaída es mucho mayor.
Finalmente, en una introspección personal detecté varios hábitos que sintomatológicamente concuerdan con la descripción de este trabajo: compras compulsivas e impulsivas y acumulación de libros y material para manualidades. Hábitos que ya tenía identificados con anterioridad y que tengo bajo control.

Lic. Denise Monti
Psicoterapeuta


Referencias:
Cruzado Díaz, L., Matos Retamozo, L., & Kendall Folmer, R. (2006). Adicción a internet: Perfil clínico y epidemiológico de pacientes hospitalizados en un instituto nacional de salud mental. Revista Médica Herediana, 17(4), 196-205. consultado en: http://www.scielo.org.pe/scielo.php?pid=S1018-130X2006000400003&script=sci_arttext
Herrero, J. (2004). Alteraciones de la personalidad asociadas a las conductas adictivas: influencia de la duración del consumo y sus implicaciones. Psykhe (Santiago), 13(1), 91-100.Consultado en: http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0718-22282004000100008&script=sci_arttext
Ballesteros, A., Mestre, H., Pechobierto, N., Puigdoménech, A., & Ramos, M. (2003). Influencia de las variables de personalidad en la adicción al trabajo en un estudio con profesores universitarios. Consultado en: http://repositori.uji.es/xmlui/bitstream/handle/10234/79395/forum_2003_22.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Salazar-Fraile, J., Ripoll-Alandes, C., & Bobes, J. (2010). Narcisismo manifiesto, narcisismo encubierto y trastornos de personalidad en una Unidad de Conductas Adictivas: validez predictiva de respuesta a tratamiento. Adicciones, 22(2), 107-112. consultado en: http://www.adicciones.es/index.php/adicciones/article/view/199
Laham, M. La conducta adictiva. Psicología de la Salud, s/f, consultado en: http://www.psicologiadelasalud.com.ar/art-profesionales//la-conducta-adictiva-78.html?p=2
American Psychiatric Association [APA], 1994; consultado en: http://www.psicomed.net/dsmiv/dsmiv.html

martes, 6 de agosto de 2019


LAS RELACIONES DE PAREJA 

SON COMO UN BAILE

Estaba viendo un video de una pareja de latinos bailando profesionalmente y dentro de su interpretación, porque con el baile a veces cuentan historias, yo me conté la mía y comencé a divagar en lo parecido (y diferente a la vez) que son los matrimonios o las relaciones de pareja al baile.


1.- Son dos individuos que forman una tercera entidad, en el baile las figuras y poses, con las parejas es el matrimonio o la relación

2.- Los bailarines se preparan individualmente haciendo ejercicio, con una buena alimentación, descanso etc, para maximizar su desempeño y ser los mejores. En el matrimonio se nos olvida esa parte y nos descuidamos (por el trabajo, la casa, los hijos, las prisas, etc.) por ende, el desempeño de cada uno se minimiza en la relación

3.- Durante la ejecución, los bailarines deben confiar ciegamente en el otro, para evitar accidentes, ya que los malabares requieren poner la integridad de uno en manos del otro, para ello se comunican con señales corporales o palabras clave haciendo que todo fluya. En el matrimonio la comunicación se pierde porque damos por hecho lo que el otro debe saber pero que en realidad no sabe y nos molestamos porque no hizo lo que no sabe que debe hacer (parece trabalenguas, pero así es😵), y no le decimos que estamos molestos porque debe saber porqué estamos así, y el otro no tiene idea. Esto genera bolas de nieve, a la larga insalvables.

4.- En los ensayos de baile, se repite cuantas veces sea necesaria una figura o un paso hasta que sale bien. ¿Cuántas oportunidades le has dado a tu pareja de intentarlo de nuevo? ¿Cuántas veces has pedido otra oportunidad? ¿Se han preguntado si pueden empezar de nuevo alguna vez?

5.- Ambos bailarines cooperan en su equipo, dan y reciben, ceden y obtienen, sueltan y agarran… pero siempre conforme su rutina de baile lo requiera, nunca antes ni después. ¿Cuántas veces reprochas un tema que ya se trató con anterioridad? ¿Cedes para recibir negociando con tu pareja? ¿Se han puesto de acuerdo en las cosas importantes de la relación? ¿Hablaron ya, por ejemplo, de fidelidad o de exclusividad sexual?

6.- Los personajes se ven radiantes, sonrientes, pulcros, divinos… En las parejas se van perdiendo esas sonrisas con el paso del tiempo, aparecen los malos modos, las caras de cansancio, se pierde lo espontáneo, las caricias furtivas, los besos robados, los regalos por nada, los mensajes provocativos, las travesuras… ¿Hace cuanto tiempo no le pones un recadito en el saco a tu esposo? ¿Hace cuanto tiempo no tomas a tu pareja y le robas un beso en medio de la calle?

7.- La coordinación es esencial en el baile para no caerse, perder el equilibrio, pisar al otro, etc. Las parejas debieran coordinar sus esfuerzos individuales para mejorar esa tercera entidad que es la pareja, así no lastiman al otro, no lo pisan, no se caen. La coordinación implica entrega, observación y sentir al otro como a uno mismo… SER UNO EN LA RELACIÓN, SIN DEJAR DE SER CADA UNO 💑.

8.- Si gana una pareja un concurso, comparten el premio. ¿Tu compartes con tu pareja tus éxitos y fracasos? ¿Le platicas de tus miedos, de tus alegrías, de tus ilusiones? ¿Comparten proyectos y los llevan a cabo? Esa falta de intimidad (no sexo, no erotismo) es lo que termina por separar a las personas porque no generan un sentido de pertenencia en la relación.


En fin, son algunos puntos que pueden servir para que bailes con tu pareja, por cierto 😱 ¿Hace cuánto no salen a bailar? 

Si crees que te falta ritmo y cadencia, acudir a Psicoterapia de pareja es una buena idea.

Lic. Denise Monti
Psicoterapeuta

miércoles, 31 de julio de 2019



LA ANSIEDAD Y EL ESTRÉS EN LA ACTUALIDAD



        
          Encontré la frase: “la ansiedad es un termómetro que nos da la imagen del hombre de este final de siglo” y me llamó la atención la normalización de la ansiedad que esta frase implica y cómo esta normalización identifica al posmodernismo.

Puchol, E., 2015, nos dice que “Los Trastornos de Ansiedad son considerados como los trastornos mentales más prevalentes en la actualidad. Engloban toda una serie de cuadros clínicos que comparten, como rasgo común, la presencia de ansiedad extrema de carácter patológico, que se manifiesta en múltiples disfunciones y desajustes a nivel cognitivo, conductual y psicofisiológico.”
La función adaptativa del estrés se ha convertido en ansiedad y esto no tiene nada de normal, al contrario, tiene mucho de patológico. 

Entre otras cosas, se debe a la exigencia del entorno y de la falta de oportunidad laboral, la violencia social, la inseguridad, la contaminación, la falta de valores (¿Que otros fctores le pondrías tu?)… Somos muchas personas las que habitamos el mundo y por ende, el hacinamiento cobra su factura generando altos grados de estrés y violencia.


Si fueran funciones adaptativas las respuestas fisiológicas y mentales de la ansiedad moderada, servirían como preparatorios de una adaptación a un medio que así lo exige, pero hoy en día, existen episodios que lejos de permitirnos adaptarnos, nos recluyen en nuestros hogares por el terror a que algo nos pase, nos convierten en autómatas serviles por terror a perder el empleo, a los primeros signos de enfermedad pensamos que es mortal, etc.


El termómetro al que se refiere la frase, quizá podrá medir la capacidad adaptativa de las personas, pero en realidad, se están creando bombas de tiempo psicológicas que pueden estallar a la menor presión y esto no es adaptación, es la respuesta a un medio al que ya no podemos adaptarnos.

¿Qué podemos hacer?

Aunque el estrés ya es parte de nuestras vidas debido a las prisas, la carga de trabajo, el tráfico, los problemas económicos, de salud, violencia, etc., y si agregamos que todas las personas a nuestro alrededor también están estresadas, no existe salvación al contagio de esta enfermedad del siglo XXI.


Posmodernismo de  Joe Barcala

Esto también dificulta en gran medida que se puedan utilizar por lo menos cinco minutos para dedicarlos a cerrar los ojos, observar la respiración abdominal, pensar en un lugar seguro, cruzar las manos a la altura de la nuca y mover el cuello de un lado al otro...

Pero, consideremos los estresores sociales (externos) y emocionales (internos) y nuestras respuestas a esos estresores o disparadores, las respuestas dependerán del grado de estrés del individuo, basándose en esto, Albert Ellis dijo que   “las ideas irracionales son absolutas (dogmáticas) por naturaleza; se expresan en términos de “tengo que”, “debería”, “estoy obligado a” y de forma categórica (todo o nada, blanco o negro)".

Por otro lado, las ideas irracionales provocan emociones que interfieren en la obtención de metas (depresión, ansiedad, culpabilidad, miedo, etc.). Las creencias racionales se expresan en forma de preferencias (“me gustaría“, “quisiera“, etc.), son relativas (no son creencias de todo o nada, sino que admite posturas intermedias) y no impiden la persecución y obtención de objetivos.” (Psicología en red, s/f)

Así es que Ellis dividió las creencias irracionales en 3 grandes grupos:

1.         Uno/a mismo/a (“tengo que hacer las cosas bien siempre, y así ser querido/a por los demás“)
2.         Otras personas (“las personas deben estimarme y siempre ser agradables conmigo. Me lo merezco”)
3.         La vida (“las personas consiguen lo que se proponen, siempre y cuando trabajen para ello. Quien no consigue todo lo que se proponga es porque no se esforzó“).

Este tipo de pensamientos absolutistas generan una gran cantidad de estrés en cada uno de nosotros, principalmente porque son automáticos e inconscientes cuando son metas inalcanzables que generan comportamientos inseguros y resultan en un gran miedo al fracaso, es decir, a la adaptación al medio exigente en el que vivimos y por ende, el fracaso a la sobrevivencia.

Entiéndase que cualquier cultura genera sus propias creencias irracionales por ejemplo, en México una creencia irracional es que las mujeres nos debemos esforzar más que los hombres para lograr nuestras metas, esto genera mucho estrés (de género).

Para encontrar cuáles son tus creencias irracionales y transformarlas en creencias adaptativas al medio, es esencial la PSICOTERAPIA como una plataforma de AUTOCONOCIMIENTO.

Muchas gracias y Excelente ombligo de semana
Lic. Denise Monti
Psicoterapeuta

Referencias:
David Puchol Esparza. Los trastornos de ansiedad: la epidemia silenciosa del siglo XXI, Revista psicologiacientifica.com, volumen 17, año 2015. Universidad de Valencia, Valencia España, Recuperado de: http://www.psicologiacientifica.com/trastornos-de-ansiedad-epidemia/

InteligenciaEmocional.org, El Estrés y la Activación emocional, consultado en: http://www.inteligencia-emocional.org/articulos/elestresylaactivacion.htm

s/a, Las ideas irracionales, según Albert Ellis, Psicología en red, s/f,  consultado en: https://psicologiaenred.wordpress.com/2011/04/29/las-ideas-irracionales-segun-albert-ellis/



viernes, 19 de julio de 2019


HOSTILIDAD EN LA PAREJA

  • Ø  Cinismo
  • Ø  Resentimiento
  • Ø  Desconfianza
  • Ø  Venganza
  • Ø  Ira
  • Ø  Frustración

     Estas palabras por sí mismas no nos dicen nada, pero en conjunto son la expresión de nuestras CREENCIAS IRRACIONALES, éstas se basan en ideas equivocadas o sin fundamento claro acerca de un hecho real, lo que determina una exagerada reacción emocional. Las ideas irracionales producen efectos emocionales intensos y negativos, por ejemplo, desesperación, angustia, frustración, ira, preocupación, depresión, entre otras y que son percibidas por el otro como HOSTILIDAD

  • Ø  Análisis del pensamiento irracional (ejemplo)

El esposo llega tarde a su casa después de una serie de eventos desafortunados: Se le acabó la pila del celular (dejó el cargador en la mañana sobre el buró), hubo junta de emergencia que se tardó más de una hora (Un cliente suyo quería cerrar la mejor cuenta de la empresa), hubo un choque en el viaducto y estaba cerrada la salida que siempre toma (la siguiente significaba 20 minutos más e camino) y el tráfico, como consecuencia del choque, era terrible. Estaba estresado y muy cansado.
La esposa lo esperaba a cenar, conforme el tiempo pasó se empezó a preocupar así que le llamó varias veces al celular, pero estaba apagado… En su mente empezaron a desfilar, como los vagones de un tren, pensamientos en este orden:
  • Ø  Seguro se le acabó la pila del celular
  • Ø  Ya no tarda
  • Ø  Y si se fue a tomar con sus amigos?
  • Ø  Quizá le pasó algo
  • Ø  Tal vez chocó y por eso el celular está apagado
  • Ø  Seguro estaba ebrio y chocó!!
  • Ø  Qué voy a hacer si se muere!! No se dónde están los papeles de la funeraria!!
  • Ø  Y si no se muere y queda paralítico?
  • Ø  Cómo lo voy a cuidar y trabajar al mismo tiempo?
  • Ø  Y si mató a alguien en el choque y está en la cárcel?
  • Ø  Qué voy a decirle a mi familia?
  • Ø 

Y así, los pensamientos corrieron a la misma velocidad que un tren en marcha y los pensamientos–vagones eran cada vez más catastróficos, además, le comenzó a doler el estómago, después la cabeza y se le secó la boca así que se tomó un café que le aceleró más esta marea de pensamientos.

Entonces tenemos que:
1) EL SUCESO ACTIVANTE: El esposo llega tarde sin avisar
2) IDEAS IRRACIONALES DE LA ESPOSA: Los vagones del tren del pensamiento
3) EFECTO EMOCIONAL: Angustia, frustración, enojo, desesperación e ira.
4) EFECTO CONDUCTUAL: Cuando llega el esposo a la casa, la esposa se le va encima furiosa y reclamándole a gritos QUE NO SOPORTA MÁS la falta de consideración QUE SIEMPRE TIENE para con ella al no avisarle, porque NUNCA le avisa y es un CANALLA que no piensa en ella… No lo deja hablar y se sigue como hilo de media con una perorata que se remonta dese el noviazgo hasta un futuro donde las visitas en la cárcel son una vez al mes.


  • Ø  ¿Cómo crees que reaccionó el esposo?
  • Ø  ¿Ella tenía bases para pensar así? 
  • Ø  ¿Tenía la certeza de que se había ido a tomar con sus amigos?
  • Ø  ¿Cómo crees que terminó esa noche para ambos?

Es por esto que es importante acudir a PSICOTERAPIA si detectas un patrón similar en tu relación, así puedes reestructurar esas ideas irracionales o pensamientos-vagones y darle el peso adecuado a las cosas que te suceden, dejarás de ser hostil con los que te rodean y serás feliz.

Mientras considera tratar de eliminar de tu vocabulario habitual palabras que denotan exageración como horrible, terrible no lo soporto, nunca, siempre, así como las palabras ofensivas o “altisonantes”. Sustitúyelas con palabras más precisas y moderadas.


jueves, 18 de julio de 2019

LAS EMOCIONES Y LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES E HIPERTENSIÓN




         Después de leer un texto de Rodríguez-Rodríguez, T. (2012) sobre los factores emocionales que intervienen en el proceso de las enfermedades cardiovasculares, y de saber que los factores subjetivos como: ira, depresión, estrés y ansiedad no son considerados en el tratamiento del paciente, considero que la presencia de un psicoterapeuta es necesaria para coadyuvar a la mejoría y mantenimiento de la salud en las ECV.
Es importante considerar la propuesta de Friedman y Rosenman sobre el patrón de Conducta tipo A y D (PCTA y PCTD) y enfatizar el esfuerzo preventivo en esos pacientes debido a la interacción con las ECV.
Los factores principales que se tendrían que atender son:
  • ü  El control y expresión adecuada de las emociones
  • ü  Distrés
  • ü  Depresión
  • ü  Ansiedad
  • ü  Solución de problemas
  • ü  Toma de decisiones
  • ü  Reestructuración emocional
  • ü  Reestructuración de herencia social vinculada a factores de riesgo
  • ü  Vinculación emocional sana
  • ü  Habilidades de autocuidado

En el caso de la hipertensión arterial y las complicaciones para el cuidado de estos pacientes creo que la depresión por ejemplo entra en esos obstáculos, ya que estos pacientes tienen poca adherencia a la terapia y por lo tanto su autocuidado es casi nulo.
Pero… ¿qué es la salud? Estos autores la definen como:

“…subrayan la conceptualización de la salud como algo más que la mera ausencia de enfermedad, implica sentirse bien tanto consigo mismo, como en las relaciones con el entorno social y ambiental al enfrentar y resolver los nuevos retos y problemas de la humanidad.”
Otros problemas asociados a la hipertensión y que la posmodernidad ha causado, son el sedentarismo, obesidad y distrés ya normalizados en la sociedad actual y de difícil erradicación por la inercia social, los Psicólogos entramos en el campo de batalla de la exigencia laboral, por ejemplo, donde es mal visto salir a tu hora o la falta de plazas laborales o la discriminación después de los 35 años para ser contratado, otros ejemplos son los matrimonios efímeros y violentos, o el hacinamiento en las ciudades que causa violencia.

Todo esto no sería problema si se considerara la psicoterapia como parte de la canasta básica de autocuidado, pero…. El estigma no nos ha dejado aún.



LA VEJEZ


“El secreto de una buena vejez no es otra cosa que un pacto honrado con la soledad”
(Gabriel García Márquez)
Antiguamente, en el pueblo inuit (Esquimal) del ártico cuando un anciano de la tribu o familia mermaba sus capacidades por la edad y no aportaba a la familia, empezaba a ser un "estorbo", el mismo solicitaba ser abandonado para morir en el hielo, solo/a en la mitad de la nada. Morían de frío, o devorados por un oso polar. Incluso hay quien dice que se "suicidaban" adentrándose en el agua semicongelada y en una muerte silenciosa y solitaria. Esto pudiera parecer terrorífico, pero para ellos era una cuestión de honor decidir en que momento morir dignamente debido a las condiciones de vida extremas de Alaska.

Para los indios Norteamericanos los ancianos son los sabios y son cuidados invariablemente, no sólo por sus familiares cercanos, sino por todo el clan. Entre sus labores está la de contar historias a los niños donde aprendan de normas sociales y buenas costumbres además de presidir las reuniones importantes de la tribu.

Los ancianos Zoques (Chiapas) son reconocidos como jamo yoye, "el que recuerda", quienes gozan de gran prestigio por su participación en los cargos civiles y ceremoniales.

Para los japoneses es de gran importancia el respeto y la honra de sus ancianos

En las Islas Fidji, los hijos aceleraban la muerte de sus padres cuando mostraban las primeras señales de enfermedad o de que iban a morir pronto, y es que creían que se pasaba a la otra vida en las mismas condiciones en que se encontraban en esta. 


Según la ONU la población mundial está envejeciendo: la mayoría de países del mundo están experimentando un aumento en el número y la proporción de personas mayores.

Según datos del informe "Perspectivas de la población mundial 2019", en 2050, una de cada seis personas en el mundo tendrá más de 65 años (16%), más que la proporción actual de una de cada 11 en este 2019 (9%). Para 2050, una de cada cuatro personas que viven en Europa y América del Norte podría tener 65 años o más. En 2018, por primera vez en la historia, las personas de 65 años o más superaron en número a los niños menores de cinco años en todo el mundo. Se estima que el número de personas de 80 años o más se triplicará, de 143 millones en 2019 a 426 millones en 2050.
Pero hoy en día uno de cada seis ancianos en todo mundo sufre de abusos, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). De todos los abusos que sufren estas personas de edad, el psicológico es el más generalizado. Se manifiesta a través de insultos, humillaciones e incluso restricciones para ver a sus familias.
Para el año 2050 se estima que la cantidad de personas mayores de 60 años se duplique y llegue a 2.000 millones. Según la OMS, si las cifras de abusos se mantienen en aumento, el número de personas afectadas se incrementará exponencialmente, llegando hasta las 320 millones de víctimas.



El Gobierno de la Ciudad de México y la Secretaria de Salud junto con el Instituto Nacional de Geriatría, proponen que que los adultos mayores participen de manera continua, ya sea como individuos o en grupo, en los aspectos sociales, económicos, culturales, espirituales y cívicos en los que están inmersos. Para lo que dan esta serie de puntos que consideran pueden lograr ese objetivo:


·         Prevenir enfermedad, discapacidad, dependencia y pérdida de habilidades
·         Participar en la medida que lo permitan las condiciones físicas, psicológicas y sociales de cada persona (incluidas las que son frágiles y dependientes)
·         Mantener y fortalecer la solidaridad intergeneracional
·         El derecho a la protección social, educación y capacitación a lo largo de la vida implica la obligación de aprovecharlo para ejercer de manera más eficiente el envejecimiento activo
·         El empoderamiento en el envejecimiento activo implica adquirir conocimiento para asumir la responsabilidad del rol social de viejo activo
·         Considerar los elementos locales y la diversidad cultural en el concepto de envejecimiento activo. 
·         Contribuir al bienestar individual, familiar comunitario y social 
Tomemos conciencia de esto y labremos un mejor futuro para... NOSOTROS, porque, ¿Qué edad vas a tener tú en el 2050?